domingo, 27 de agosto de 2017

Más de la mitad de la población quiere votar en las regionales

La participación en las elecciones implica la posibilidad de "arrebatarle al gobierno espacios claves de poder estratégico", señala el presidente de Datincorp. Afirman que la MUD puede estructurar un discurso para motivarla.

JOSÉ GREGORIO MEZA | JGMEZA@EL-NACIONAL.COM
27 de agosto de 2017

Más de la mitad de los venezolanos quiere votar en las elecciones regionales, coincidieron las encuestadoras Datincorp, Delphos y Hercon. Los estudios de opinión, todavía en proceso de campo, revelan que la oposición ganaría al menos 14 gobernaciones, en el escenario menos favorable.

El consultor político Jesús Seguías, presidente de Datincorp, aseguró que al venezolano le gusta participar en procesos electorales: “Desde el punto de vista cultural somos chistosos, de buen humor, nada que ver con muerte y violencia. Eso contribuye a que tengamos alta propensión a manifestarnos con el voto”.

Ese planteamiento puede explicar el hecho de que más de la mitad de la población esté decidida a votar. “Eso significa que la tendencia se puede incrementar en la medida en que se acerquen las elecciones, dependiendo de cómo la oposición lleve la campaña”, precisó.

Afirmó que la participación debe ser mayor que la esperada, aunque menor que la obtenida en las parlamentarias de 2015. Cree que la abstención seguirá favoreciendo al gobierno.

Puntualizó que las regionales no deben verse solo como una aspiración para conseguir gobernaciones: “Se trata de arrebatarle al gobierno espacios claves de poder estratégico”.

Seguías indicó que en un proceso electoral normal –con el mismo sistema de votación– y siempre que los opositores logren convencer a su militancia de la importancia de ese proceso, el chavismo corre el riesgo de perder todas las gobernaciones. “Es el golpe más duro que recibiría el gobierno en 18 años, incluso mayor que lo sucedido el 6 de diciembre de 2015”, aseguró.

Y agregó: “Las gobernaciones manejan poder real, así les monten después estructuras paralelas. Es inconmensurable todo lo que pierde el chavismo. Hay muchos activistas pagados por gobernaciones y alcaldías. Es un detalle que hay que hacérselo ver a la gente”.

Félix Seijas, director general de Delphos, calculó que debe haber una abstención mayor que la de 2015. “Eso va a depender de qué tanto se asocien estas elecciones al cambio que la gente quiere. Aquí es donde le puede resultar complicado a la oposición venderlo como lo hizo en las parlamentarias. Esas elecciones se asociaron con el cambio de poder y ese mensaje fue efectivo”, destacó.

Aclaró que hay estados como Miranda, Zulia y Lara en los que es muy difícil que la abstención llegue a poner en peligro la victoria de la oposición, siempre y cuando se vaya con un candidato único.

En otras entidades sí puede afectar: “Delta Amacuro, por ejemplo, es muy difícil. Diría que si la oposición gana ahí, sería una sorpresa. Apure, Guárico y Trujillo también podrían verse comprometidos”.

Alertó que si bien la abstención afectará más a la oposición, el gobierno asimismo deberá lidiar con dificultades. “Los problemas se han agravado y movilizar a su gente le va a resultar complicadísimo. Lo de la asamblea constituyente fue algo distinto porque allí participar hacía visible que apoyabas el proceso. Esto es diferente”, apuntó.

Los datos de Delphos proyectan que puede haber alrededor de 60% de participación: “Los movimientos del oficialismo van a ser importantes porque su trabajo es desalentar ese voto: inhabilitación de candidatos, hacer sentir al opositor impotente, que haga lo que haga el gobierno tiene el control del poder. El valor del voto es que sirva como herramienta para el cambio. Si tú quitas esa sensación, la abstención va a aumentar”.

La oposición podría ganar, según sus cálculos, entre 17 y 20 gobernaciones. “Si la oposición mantuviera el nivel de participación de 2015, debería ganar no menos de 20 gobernaciones. En cualquier escenario la mayoría de las gobernaciones quedará en manos opositoras”, destacó.

Motivación

Marcos Hernández López, director de Hercon Consultores, destacó que la participación de la oposición en las elecciones regionales es lo pertinente: “No ir al proceso es entregarle a un gobierno que cuenta con apoyo de 15% las 23 gobernaciones”.

Advirtió que explicar la decisión después de la lucha de cuatro meses no va a resultar fácil. “Esos son espacios significativos que se necesitan para el cambio”, aseveró.

Los estudios de opinión de su consultora indican que la intención de voto se aproxima a 55%, mucho más marcada por quienes se identifican con el chavismo: “Hace 20 días era de 45%. Se comienza a mover porque eso es parte de una reflexión que el electorado está haciendo”.

Recalcó que aun con una abstención cercana a 50% la oposición estaría asegurando entre 14 y 15 gobernaciones. Considera que los estados más débiles son los que tienen mayor población rural, donde a su entender el gobierno tiene mayor fortaleza: Apure, Guárico, Cojedes, Portuguesa, Delta Amacuro, Sucre y Trujillo.

Aun así, Hernández intuye que la participación será menor que en las últimas legislativas. “Los momentos históricos son diferentes. Lo que se ve en este momento es que va a haber mayor abstención, pero en mes y mediola Mesa de la Unidad Democrática puede estructurar un discurso que motive la participación. No se deben ver como gobernaciones, sino como espacios conquistados a la democracia. Ya que no se pudo lograr Miraflores, se puede ir de abajo hacia arriba, de las regiones hacia el gobierno central”, expresó.

CIFRAS

20 gobernaciones debería ganar la oposición si la participación se mantiene en los niveles de las parlamentarias de 2015, señaló Félix Seijas, presidente de Delphos

45% era la intención de voto hace 20 días; ya se aproxima a 55%. “Se comienza a mover porque es parte de una reflexión del electorado”, dijo Marcos Hernández López

El dato

En las elecciones parlamentarias de 2015 hubo 14.385.349 votos, lo que representó 74,17% de participación. La Mesa de la Unidad Democrática obtuvo 7.726.066 sufragios (45,2% del total), lo que le valió obtener 112 diputados a la Asamblea Nacional. El Partido Socialista Unido de Venezuela tuvo que conformarse con 55 escaños, producto de 5.622.844 votos, que representó 40,91%.

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